Esperando al viento para el cruce Atlántico

Después de nuestra feliz estancia en San Juan, el lunes regresamos al varadero para controlar el arreglo de la avería del sail drive. Nos trajeron nuestros amigos Coni y Orlando que se quedaron con nosotros a comer, para celebrar el cumple del capi. Él, que tenía previsto celebrar una órgia para tan señalado día y que había hablado de ella a propios y extraños, se ha visto obligado a aplazarla, que no suspenderla, por causas ajenas a su voluntad y sustituirla, en el día de hoy, por una comida familiar. Jua, jua.

La mejor parte del día ha sido que la reparación ha concluido, aparentemente bien. Los mecánicos de Marine Mechanical Services, representante oficial de VOLVO PENTA, han sido serios, limpios, eficientes e incluso formales en los horarios.

El martes, llamamos al taxista que nos había llevado a San Juan y nos condujo al súper para hacer el abastecimiento del barco de cara a la próxima travesía. Otros 50 kilitos que le añadimos.

Con todo listo, el miércoles al agua. Allí una vez comprobado que todo está bien, llenamos los tanques y las garrafas de gasoil y nos abarloamos a un pantalán para limpiar el barco que había quedado cual cagadero pajaril.

Prati regresa al agua
Prati regresa al agua (1)
Prati regresa al agua (2)
Con todo hecho, al fondeo.

Allí hablamos con la Rueda Argentina de navegantes y nos indicaron que el domingo sería un buen día para partir. Se espera un viento, aunque no fuerte, favorable. Nos pusimos muy contentos.

Media hora más tarde, nuevo problema. En la revisión del generador aparece agua salada en la bandeja.

Comprobaciones, más comprobaciones, desanimo, cabreo y regreso a Marina Puerto del Rey a buscar asistencia técnica. Aquí estamos, viendo los destrozos que la electrolisis provocada por la mala instalación del PACTOR III, ha ocasionado a los tubos de inox del generador. El codo de admisión del agua salada tiene un poro y como no hay repuesto lo mandan a reparar con soldadura.

Menos mal que estamos encontrando profesionales serios, gente amable y explicaciones en nuestra propia lengua, en este caso Tropical Energy Systems ha sido la empresa que nos está atendiendo, en ambos casos nos las ha recomendado Antonio Vecino, un malagueño afincado en esta zona, desde hace 40 años. La suerte le ha sonreído y efectivamente ha hecho las américas. Aquí todo el mundo le aprecia y se ha convertido en un español de referencia, curiosamente su empresa se llama Los Españoles. Dentro de lo malo, estamos de suerte.

Otra vez al fondeo de isleta Marina. Allí arrancamos el generador para seguir comprobando la reparación. En media hora de funcionamiento del generador, más agua salada.

Levantamos fondeo y arrumbamos hacia la marina, mientras llamamos al mecánico. Acuden temprano y se comprueba que hay otro tubo de acero inoxidable que parece un queso gruyere, esta vez cuatro o cinco poros. Cuesta un guevo sacarlo y se va a sustituir por uno de goma.

Hoy viernes pensamos que todo quede listo, podamos retornar al fondeo y preparemos allí el barco y nuestra cabeza para internarnos en la mar océana de vuelta a la vieja Europa.

Nuestros amigos del Atlántide, Peregrina y Celebration ya están en ello. Salieron con poco viento y han tenido varios días a motor. Ahora parece que empiezan a velear un poco mejor. Nos hablamos en la Rueda Argentina y en otra frecuencia más baja entre nosotros.

A las 12 UTC sus posiciones eran:

Peregrina en el 26º 26´N y 58º 34´W

Celebration en el 25º 12´N y 60º 11´W

Están pasando una zona con lluvias y muy cubierta, en ese momento ambos a motor, con poco viento.

Atlantide en el 22º 54´N y 64º 48´W, él si lleva viento, navegaba a 7 kts. aunque no con el rumbo apetecido.

A las 23 UTC volveremos a contactar.