Desde Horta, travesía Sudáfrica – Açores

Como ya comentamos, el domingo arribamos a Horta en la isla de Faial (Açores). Con las primeras luces del amanecer, a 50 millas de distancia, ya se vislumbraba la silueta de Pico, la cumbre que destaca en la Isla del mismo nombre, que queda justo enfrente de Faial. La  montaña de Pico con sus 2.351 m. fue lo primero que avistamos y que nos fue animando en la llegada. Después las nubes cubrieron su silueta y no hemos vuelto a verlo.

La marina de Horta, a pesar de que la época álgida de llegadas desde el Caribe ya pasó, sigue estando petada. Al llegar nos dijeron que teníamos que fondear en el puerto y después ir a las oficinas para hacer la entrada.

Llegamos justo a la hora del almuerzo y para hacer tiempo nos fuimos al Peter, el mítico café donde todos los navegantes vamos a exagerar el tamaño de nuestras olas y a dejar banderas de recuerdo. Esta vez no estaba ocupado por los navegantes, sino por turistas de tierra, muchos por cierto. 

Después en la Marina, trámites fáciles de Aduana e Inmigración, pero de plaza de atraque nada de nada. Que quizá mañana.

Y así 3 días de espera en el fondeo. Allí no te aburres, no. Continuamente llegan barcos y todos quieren fondear encima tuyo. 

Ayer, por fin, nos dieron entrada. Cuando fuimos a arrancar motores, el de estribor dijo que no. Pruebas y más pruebas para confirmar que la batería se había muerto. Althino, nuestro amigo de Horta, desde la época de la Rueda de los Navegantes, nos consiguió un arrancador de baterías y pudimos venir al atraque. Estamos en el muro exterior abarloados a otros 2 catamaranes.

Ya vino un electricista con una batería nueva y hemos quedado para la próxima semana para ver lo que pasa con las luces del mástil que no funcionan. Por la tarde también nos visitaron de la velería. Tienen los sables que necesitamos y no habrá problema para su sustitución.

Hemos compartido celebración con otros navegantes,  Andrea y Alan, en una comida prolongada hasta las 10 de la noche, cayeron 7 botellas de vino. No vamos a comentar, por vergüenza, el fin de fiesta.

La última semana de navegación se nos hizo larga. Parecía que no disminuían las millas, aunque el viento fue propicio hasta el aproaching, en que ya decidimos arriar velas y con motor asegurar llegada a mediodía.

Hemos navegado 6.978 Nm, es decir, travesía de 7.000 millas, en 52 días y sus correspondientes noches. 

Estamos muy orgullosos y felices de haber logrado, con éxito, este hito. 

Desde el Ecuador, hacia el N fuimos navegando de ceñida, casi continua,  para recurvar el Anticiclón sin tener que llegar a las islas del Caribe. Fue bien duro. Lo logramos en la longitud 45° W a 1.000 millas al E del Caribe. ¡¡¡ Bien !!!

Datos finales:

Latitud 38° 31’842 N

Longitud 28° 37’420 W

Millas navegadas: 6.978

Horas de navegación: 1.210

A motor: 174

A vela: 1.036

Como estaba previsto estamos haciendo las reparaciones necesarias y descansando. La parte de travesía que nos falta hasta Vigo, que será nuestro puerto base, unos 7/8 días se harán cuando las condiciones de meteo y nuestras ganas de finalizar, confluyan.

Y esto es todo de momento.

Domingo 29 de Mayo

Esta semana hemos disfrutado vacaciones. Días de calma chicha, quedándonos durante horas al pairo o bien avanzando con el génova muy despacio e incluso algunas horas a motor. A bordo relax total, un poco de limpieza, veladas tranquilas al exterior, puesta al día con el déficit de sueño, vamos, un descanso merecido.

A partir del viernes entró el viento de componente NE, o sea, justo de a donde vamos y estamos escribiendo otro capítulo diferente. Pero ese ya se irá viendo.

Sensaciones: Esta travesía la hemos planificado desde un principio a modo de delivery (traslado). No se trata de una travesía al uso, con etapas pensadas para disfrutar del camino, sino con el único fin de llevar el catamaran de vuelta a casa y dar por terminada la Vuelta al Mundo mundial. Por eso es una travesía muy muy larga, llevamos 45 días de navegación que por momentos se hace tediosa y en la que lo lúdico ha quedado en segundo plano. Esto no quiere decir que no tengamos momentos de relax y disfrute.

Magdalena: A mi, particularmente, me encanta mirar alrededor, la inmensidad del océano, rodeados de nubes, con formas caprichosas y sentirme aislada de casi todo. Hacer esta navegación mano a mano que nos une y nos acerca a la consecución de un desafío.

Carlos: Las malas sensaciones fueron sobre todo, hasta el momento, el mal tiempo, días y días ciñendo. Varios chubascos que te ponen los pelos de punta y sobre todo el de la noche del 7 al 8 de mayo. Durante una hora tuvimos pérdida total de control. Sudores fríos. Miedo en estado puro.
Las encalmadas del Ecuador y ahora de las Horse’s Latitudes, esas en las que los navegantes españoles sacrificaban sus monturas por falta de agua potable. Hasta aquí cosas que deberían ser normales y asumirse como tal, pero en nuestra condición de edad, esto se lleva bastante mal.

Sensaciones positivas: Hubo muchos momentos de encanto, sobre todo las noches estrelladas. Si vas a vela, a velocidad moderada, la calma es impresionante, el firmamento reventón. Horas en paz con tu conciencia. Tratas de repasar los nombres de estrellas y constelaciones que antaño conocíamos y que con el paso del tiempo se han ido olvidando. Ahora nos queda, Osa Mayor, Polaris, Casiopea, La Cruz del Sur, Las Tres Marias, Marte, matutina y Venus, vespertina, la Vía Láctea y pocas más cuyo nombre recuerde y pueda ubicar en la esfera celeste.

Yendo a motor, la incomodidad del ruido se va haciendo monótona y finalmente las percepciones son casi las mismas, con una pequeña ventaja, que al no llevar las velas arriba se abre más el espectro.

Algunos atardeceres, como es bien sabido, son mágicos. El rojizo en el horizonte se abre huecos entre nubes o resplandece en un marco amplio. No puedo olvidar noches de luna de resplandor intenso, incluso en los cuartos. La navegación nocturna se hace más amorosa. Hablamos con buen tiempo. Tardes soleadas en la bañera, algún día incluso con aperitivos y disfrute de esos momentos. En fin, dentro del delivery que está siendo esta travesía, finalmente recordaremos los buenos ratos y aquellos pocos malos se irán olvidando.

Tripulante: Venir solos fue una decisión que nos costó adoptar. Valorando los pros y los contras, hasta la fecha pensamos que ha sido correcta nuestra decisión de volver a recorrer el Atlántico en solitario (pareja), pero en algunos momentos duros vuelves a pensar si no nos habremos equivocado, tomando un riesgo superior al que nos permiten nuestras facultades físicas. Las grandes travesías siempre las hemos hecho en solitario y esta, que es aún más grande, también la hemos querido hacer así.

La posición a las 8:00 h UTC del domingo
Latitud: 28° 48’78 N
Longitud: 40° 12’09 W
Millas navegadas desde Saldanha: 6.073
Millas hasta Horta: 822

Abrazos para todos.

Domingo, 22 de Mayo

Esta semana, a partir del jueves y poco a poco, se han ido mejorando las condiciones de navegación. El méteo de esa mañana es más optimista y parece darnos la oportunidad que estábamos esperando para arrumbar hacia Azores.

De momento estamos navegando con rumbos alrededor de 300° y además poco a poco va bajando la intensidad del viento. El mar, más pronto que tarde, le acompañará, ya nos tiene aburridos, de vez en cuando viene un tren de olas que nos pone bravos, golpes en el plan, brincos, surfeos, además de meter el agua en cascada tanto en la bañera como en la banda de barlovento.

Como la navegación ha dado poco de qué hablar, esta semana vamos a cambiar el tercio y hablaremos de comida. A bordo empiezan a terminarse los alimentos frescos. Nos quedan unas pocas manzanas y he preparado la última ensalada de repollo y zanahoria. Parece mentira lo bien que se han conservado los repollos comprados el día 8 de abril en un centro comercial, no al productor.

La ensalada de repollo y zanahoria, que en algunos lugares hemos conocido como coleslaw, ha sido un plato recurrente en nuestra mesa, precisamente para utilizar los alimentos frescos antes de que empezaran a deteriorarse. La acompañamos con jamón York de lata o salchichas o melba, resulta rico y refrescante.

Otro pilar básico de nuestra alimentación son las lentejas, las famosas lentejas del PRATI. El tema viene de cuándo nos hicieron un reportaje para la revista Tiempo antes de zarpar de Vinarós y al fotógrafo le impactó la olla express con su carga de lentejas preparadas con anticipación al zarpe. Como siempre me he mareado los primeros días, procuraba llevar comida preparada para no tener que cocinar. Ahora, ésta, que se planteó como la última gran travesía del PRATI, es la primera en que no me he mareado nada de nada.

Otro día de la semana ponemos carne, bien guisada con vegetales de lata, o algún tipo de filete o chuleta. En Sudáfrica la carne es buena y llevamos varios cortes congelados. Mientras tuvimos patatas las ensaladas con huevo cocido, pimientos asados, tomates de lata o desecados, aceitunas negras y bonito, o bien ensaladilla rusa. La pasta, con salsa de tomate boloñesa o similar, tampoco puede faltar a bordo.

Los domingos procuramos hacer algo especial para marcar un poco los tiempos. Arroz negro, mientras hemos tenido calamares en tinta de lata, arroz con gambas ahora, o confit de pato el domingo que estábamos en el fondeo de St. Helena.

Ahora empezaremos a hacer las ensaladas de pasta o quinoa con maíz, judías verdes, guisantes, etc. Por las noches hemos comido bastantes sándwiches, sobre todo después de la aportación extraordinaria de pan en St. Helena, bien con jamón y queso o nuestros preferidos, de espárragos verdes con bonito y mayonesa. Huevos a la plancha o en tortilla, con chorizo o jamón, sopas instantáneas y los alimentos secos, tipo cecina que son muy típicos de Sudáfrica y de los que compramos una buena cantidad.

También disponemos de “la caja de los quesos”, con variedad, dentro de lo posible para completar alguna cena y otra de fiambres, jamón, copa, chorizo de sarta spicy, un lujazo que encontramos casi por casualidad y que resulta muy similar a nuestros chorizos, etc. Por las tardes degustamos una rica Vitamina C. Comida seguimos teniendo para muchos días.

El sábado está claro que el viento toda la noche ha sido de F-4, que llevamos 8 horas con vientos del E, maravillosos para ir hacia el N y que aunque vayamos despacio, vamos. En la segunda guardia de Carlos nos hemos encontrado un barco, sin AIS en principio. Carlos habló con ellos y detectó acento familiar. Así que preguntó y era barco de bandera española y el oficial con quien hablaba resultó ser de Aviles. Charleta y alegría por la coincidencia. En medio del Atlántico coinciden Navia y Aviles. Cuando estaba a 6,7 Nm. lo vimos en el AIS, ellos a nosotros no. A cambio parece ser que nuestro eco de radar es potente. Con el siguiente barco ha habido mas suerte y el AIS ha funcionado. En total han sido 5 barcos los que hemos visto esta semana, pero resulta estupendo saber que hay alguien más ahí.

A partir del día 21 hemos puesto un waypoint en Horta – Isla de Faial – Azores.

La posición a las 8,00 h UTC del domingo.

Latitud: 20° 39’07 N
Longitud: 45° 26’38 W
Millas navegadas desde Saldanha: 5.395
Millas hasta Horta: 1.384

Saludos a todos.

¡Vaya semanita!

La mayor, que se bajó desordenadamente sin aproarse, a mitad de la bajada quedó recostada sobre el obenque y en ese momento, con el chaleco salvavidas y los arneses correspondientes, en mitad del diluvio y fuerza del viento, me subo a botavara y con gran esfuerzo y casi sin ver, sin linterna de cabeza, bajo lo que resta de vela y amarro a botavara por varios puntos, Magdalena está en el interior sin poder ver lo que estoy haciendo y cagada hasta que aparezco hecho una sopa, en el cokpit.

La adrenalina compensa sobremanera la ausencia de fuerza física, derivada de la edad, para hacer este tipo de maniobras, en la noche y bajo el temporal. Afortunadamente este chubasco apenas duró una hora, que se hizo eterna.

Domingo: Con la luz del día evaluación de daños: hay cuatro sables partidos en cabecera. Solo han librado los dos de abajo, los más grandes.

Hoy que reina la calma, el mar se ha suavizado bastante, hay buen sol y un viento constante de F-3-4, Carlos lleva todo el día estudiando la forma de resolver el entuerto. Vaya domingo.

La parte positiva es que navegamos a 4-5 kts, con 8 a 12 de viento, del 120° de real, solo con el pequeño y fuerte génova, 73 m2 que tira de 25 Tm. No está nada mal.

Lunes: Cumpleaños del capitán. Así que empezamos el relevo de guardia cantando el cumpleaños feliz, en versión brasileña que es muy chula.

A pesar de la celebración, seguimos trabajando en la reparación de los sables. Ayer conseguimos dejar reparado uno, cortando la parte rota y adelantando el terminal de popa. Ahora quedarán unos cm de vela sin sable, pero peor es nada. Curramos de lo lindo para hacer ballesta y meter el sable forzado en sus terminales. No está nada mal.

Martes: Hace un mes que salimos de Saldanha. Las relaciones personales a bordo se están agriando, cabreos y discusiones afloran con frecuencia. Tenemos buenas intenciones pero a la fuerza ahorcan. A menudo nos hacemos propuestas de buen rollito pero el sueño, la mala mar, la incertidumbre del destino, el aburrimiento, etc. nos pueden.

Ayer quedó también arreglado el sable más grande de los partidos, el tercero desde la botavara. Hubo la suerte de contar con un tubo de inox que se hizo en Mar del Plata para resolver una rotura anterior de sable y que encajaba como anillo al dedo para esta ocasión.

Aprovechando que el mar estaba inusualmente tranquilo, calibramos ambos pilotos automáticos. Hemos hecho 24 horas a motor, incómodo y con la preocupación del consumo de gasoil, pero es lo que hay. Además día gris y feo y un mar sembrado de sargazos desde hace días.

Miércoles: Hoy desde primera hora del día, teniendo en cuenta que amanece casi a las 9 hora local de Sudáfrica y de España, por que no hemos cambiado los relojes, apareció el sol y nos alegró la vida, además hay un vientecillo de 9-11 kts que empuja al génova y los pronósticos meteorológicos que dicen que esto se está acabando, la zona ITCZ. ¡Yupi! Cochina zona llena de inestabilidad y nubes horrorosas, cúmulos, alto cúmulos, chubascos y normalmente acompañado de tormentas con descarga eléctrica, de esto último hemos librado afortunadamente.

Hemos instalado el tercer sable que Carlos arregló ayer con un empalme de trozos y hasta ahí hemos llegado. El último, el más pequeño, simplemente no está. Esperamos que la vela, cuando al fin la icemos, no se queje.

Jueves: Estamos mosqueados con Predictwind y sus pronósticos para esta zona que cambian cada día y aciertan más bien poco y sobre todo enfadados con Iridium GO que no da el servicio ofrecido, no ha habido forma de que los mails que enviamos lleguen a destino. Solo llegan los que enviamos al soporte técnico de Predictwind. Curioso ¿no? Estamos funcionando a base de enviar sms que admiten hasta 1000 caracteres, dividiéndolos el sistema en bloques de 160 y recibiendo mails, ya que si nos contestan con sms cuestan 1€ cada uno.

Cambiando el tercio, por fin han aparecido barcos en la pantalla del radar, hasta 4 en el amanecer, a distancias superiores a las 17 Nm. y sin AIS.

Viernes: El nuevo meteo de ayer por la noche nos devuelve la esperanza. Nada que ver con el de la mañana, con calmas para un montón de días que nos había dejado decepcionados. Volvemos a tener Alisios para varios días y eso da vidilla.

Esta mañana la previsión meteorológica confirma los mismos vientos, muy establecidos del NE y con F-3-4 y procedemos a izar mayor. Dos de los sables han quedado prácticamente perfectos, con sus añadidos de tubos de inox. El sable al que se adelantó el terminal para compensar su menor tamaño tras cortar la zona rota, ha quedado un poco corto, la vela hace arrugas en la zona de popa. Ignoramos si se estirará ella sola y si en ese caso el sable se saldrá del terminal de popa.

Sábado: En la primera guardia aparece un barco con eco fuerte y también sin AIS. Raro. Durante media hora tenemos rumbo de colisión, ya está a 12 Nm meto 10 a babor y contacto por VHF con el oficial de guardia. No aparecemos en su pantalla de AIS. Nuestro equipo tiene avería. Unas veces da señales y habitualmente no.Tema a revisar conexiones. Mañana será otro día.

Días atrás ha dado fallos el mando morse del motor de estribor. Sube y baja revoluciones aleatoriamente por su cuenta. Llegó a dejar a 0 la velocidad. Arrancamos el motor de babor y a seguir. Posteriormente hemos caído en la cuenta de que el mando morse tiene duplicado en el lado de babor, pero sin lectura de revoluciones.

Vamos a toda pastilla con rumbos alrededor del 310° sin tener muy claro lo que vamos a hacer, si será factible recurvar al Anticiclón o al final habrá que dar el brazo a torcer para arrumbar al Caribe. En los próximos días iremos viendo.

Hay sol, las temperaturas han bajado desde la zona ecuatorial, son agradables y no sofocantes.
Lo que sigue estando muy molesto es el mar, las olas se suceden con periodos muy cortos y resulta machacante cuando se navega de ceñida. La previsión es que aumenta la intensidad del viento y la altura de las olas, no así la frecuencia que sigue estando alrededor de 6 segundos.

Posición a las 8 UTC del 15/05/22

Latitud: 11° 37’96 N
Longitud: 31° 45’92 W
Millas recorridas desde Saldanha: 4.342

Saludos a todos.

Regreso al N

Estamos de vuelta en el Hemisferio Norte. Con el bordo al N del viernes, fuimos comiendo minutos de latitud de hora en hora, para acabar superando el Ecuador a las 3,50 horas del sábado 7 de Mayo.

Nos quedamos los dos en la guardia para el evento y lo celebramos con unos canapés de sándwich, como no, y una media botella de champán sudafricano. Ambos pensamos que será el último cruce que hagamos con el PRATI, ya que estamos diciendo adiós a las grandes travesías.

El primer cruce, muy emocionante, fue en la travesía a Fernando de Noronha, desde Cabo Verde. La segunda vez cuando regresamos a Galicia, desde Salvador de Bahía, vía Caribe, para realizar instalaciones necesarias antes de retomar la travesía de Vuelta al Mundo. La tercera cuando volvimos a Brasil, a la altura de Vitoria y desde ahí seguimos hacia el S, donde lo habíamos dejado. Era el año 2011. Desde entonces, siempre hemos navegado el Hemisferio S. Y ahora, por fin, volvemos a casa.

Esta semana ha traído el calor, intenso y pegajoso, los chubascos que aceleran el viento durante un corto periodo de tiempo, duplicando su intensidad y soltando un montón de agua y el susto nocturno del martes por la noche:

Acababa de empezar la guardia y entra la alarma de proximidad de AIS. Inmediatamente busco en el plotter la presencia de señal de otro barco, que se aproxime a 8 Nm que es el punto de consigna establecido para que salte la alarma de proximidad. El triángulito con una línea en la proa, que debería aparecer en el círculo de 8 Nm, aparece justo encima del dibujo de nuestro barco. Bajo la escala hasta 0,75 Nm y veo que la señal está a 0,125 Nm (aprox. 200 m). Pánico. Meto 20° a babor y pego un salto al exterior para visualizar sus luces, no hay, más susto todavía, ya que el rumbo, en ese momento, es justo de colisión.

Pienso que puede ser una pesquera sin luces, ¡¡Magdalenaaaaaa!! llamo a voces para pedir ayuda. Nos desojamos y seguimos sin ver nada, la noche es totalmente oscura, sin luna, con lo que cualquier mínimo destello se vería a la perfección. En ese paso de los segundos vemos en pantalla que el barco en cuestión pasa por nuestro través dirigiéndose a la popa. En pocos segundos vemos que se aleja. Respiración agitada. Pulsamos detalle en AIS y aparece la información:

MMSI 098339640
NAME: AIS NET MARK
VELOCIDAD: 1,4 kts.
DISTANCIA: 0,38 Nm
DIMENSIONES: 4 x 4 m

En ese instante estamos valorando la presencia de una gran red, marcada en un extremo por este artilugio y cuya ubicación desconocemos. No sabemos si estamos pasando por la parte libre o sobre la red. Magdalena plantea la posibilidad de que sea una de las artes de ayudas a la pesca que en su día nos explicó nuestro amigo Ángel Garcia Paz, de NAUTICAL Vigo y que después vimos en directo en el atunero español que visitamos en Port Louis (Mauricio). Se trata de una especie de flotadores lanzados a la deriva, que llevan unos sofisticados equipos, a su sombra se concentran gran cantidad de pececillos, buscando protección. A su captura se concentran grandes masas de pelágicos. Por densidad de la sombra del sonar se calcula el tonelaje de la masa de pescado, se envía vía internet a su base, bien en tierra o a flote, e inmediatamente, cuando merece la pena, la pesquera correspondiente pone rumbo a ese lugar, incluso desde grandes distancias, para faenar allí.

Pasado un buen rato, vamos perdiendo el susto y relajándonos. Pensar que en mitad de la inmensidad del Atlántico Sur pueda existir la posibilidad de una colisión, con el único barco visto en pantalla, con una amplitud de 72 Nm, en los últimos 16 días de navegación, llevando a bordo doble sistema de vigilancia, radar y AIS, nos ponía locos. Suponemos que el detectarlo tan cerca se deba a su escasa altura sobre el agua.

Y para colofón de la semana, anoche recogimos génova porqué cayó el viento totalmente. A los 5 minutos, un chubasco nos metió 36 kts y toda la lluvia del mundo. Condiciones durísimas en las que Carlos bajó la mayor sin casi ver por la fuerza de la lluvia y nos quedamos a motor toda la noche.

Posición a las 8 UTC
Latitud: 1° 41’19 N
Longitud: 19° 17’78 W
Millas recorridas desde Saldanha (SA): 3.369