Caleta Brecknock

Estamos en posición

Latitud.- 54º 32´68 S

Longitud.- 71º 54´64 W

Ayer navegamos durante 13 horas para avanzar 70 millas en nuestro recorrido hacía el Pacífico. Por primera vez en esta navegación las velas de proa se desplegaron e hicieron su trabajo durante una parte del recorrido.

Los vientos de fuerza 4 y 5, con componentes SW lo hicieron posible.

En Caleta Emilita llovió sin descanso y el pronóstico también era de lluvias para este día, sin embargo el sol hizo su aparición en algunos momentos, entre nubes y claros y solo llovió de vez en cuando, lo que ya nos pareció una maravilla.

Las temperaturas oscilaron entre 6,7 y 9,8º y el agua está a 9º. En travesía la sensación térmica es de 0º y vamos pertrechados con 3 y 4 capas de ropa. Las capotas, cuyos vinilos que estaban opacos se sustituyeron por unos nuevos en Ushuaia, con cambio del sentido de apertura de las cremalleras, que ahora permiten abrir solo un resquicio por la parte superior para aumentar la visibilidad, son un elemento absolutamente imprescindible.

El recorrido está tachonado de bajos y piedras en muchas zonas, con lo que la vigilancia en navegación se debe hacer en el exterior y con mucha atención. Las cartas electrónicas, por estas latitudes, están descompensadas e incompletas. La mayor parte del tiempo el barco lo sitúan en tierra, lo que hace imprescindible navegación a vista. Cada vez que llega un chubasco fuerte, la visibilidad se reduce y la incertidumbre de en que punto estamos exactamente, aparece.

Salimos rumbo SW. En el través de Bahía Rosa, por el Canal Ballenero, recurvamos al NW. Entre Isla Stewart e Isla Basket aparece, por babor, una ventana al Pacífico. Luego doblamos Isla Georgiana y entramos en el Canal Brecknock para fondear en Caleta Brecknock, Seno Ocasión. Travesía a motor apoyada por el foque y solo a vela, con foque y Génova, unas 10 millas por el Canal Ballenero.

En la ventana al Pacífico aparece mar de fondo y oleaje. La Bahía Desolada, es el siguiente punto y como no podía ser de otra manera, está yerma, sin ninguna vegetación. Que triste debía resultar llegar a ella desde mar abierto, esperando encontrar las bondades de la costa y que lo que hubiera fuera algo tan pobre.

A las 8 de la tarde, hora local, entramos en el Seno Ocasión. Es un lugar totalmente diferente a los fondeaderos anteriores. Altas paredes de granito, con formas redondeadas, trazan este fiordo. La vegetación es escasa, concentrada en las partes bajas, el agua, en distintas cascadas, nos acompaña con su incansable sonido. Sobrecoge y cuando los últimos rayos de sol iluminan alguna de las zonas, sentimos un momento de respeto casi religioso por lo que la naturaleza puede ofrecer a nuestros sentidos.

Hoy la previsión es de vientos fuertes y lluvia y toca quedar a resguardo. Estamos fondeados con ancla y 5 cabos a tierra en un rincón donde apenas cabe el barco.

One thought on “Caleta Brecknock

  1. Hola, «Olivivia», y todos!
    Intente mandar un comentario, pero parece que no llegó. Para resumir:
    Planteaba, que parcia que habiamos cambiado de cronista, pues echamos de menos esos relatos anteriores, y que hablaban mas de la navegación, corrientes.., mareas fuertes,…notificaciones con la Chile, …en fin, un poco en plan mas derrotero, para los que un dia pretendan seguir vuestra estela. si fuera posible agradecido.

    Un fuerte abrazo y os seguiremos… felicidades por vuestro saber hacer.

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