Ya estamos a punto de zarpar de Ushuaia. Tras la llegada de Begoña y Carlos

                                  la llegada de Begoña y Carlos

se han seguido haciendo las reparaciones y puestas a punto para emprender la travesía con garantías.

los Carlos arreglando el dinghy que tenía un pinchazo                      

También cambiaron la bomba de presión del agua potable, que les habíamos encargado a España y una pequeña avería que surgió en el motor de estribor. Parece que ahora todo está Ok,

Todo, todo, no. El capitán, intentando acercar el barco en un día de viento fuerte, para poder subir a él, ya que los vientos dominantes lo separan del muelle. Desde dentro tenemos hecha una maniobra para acercarlo, con ayuda de un winche, lo que no es posible cuando estamos fuera.

En esa ocasión, no había nadie a quien pedir ayuda, se veía como se acercaba la lluvia y en un esfuerzo excesivo se lastimó la zona lumbar. Han pasado diez días, con leves mejorías y después momentos en que casi no podia caminar. Visita al médico y ahora a tomar un potente antiinflamatorio y a reposar un poco. Hemos retrasado por ese motivo la salida hasta mañana domingo para que se recupere un poco más.

Antes de esto, hemos estado muy animados, con visitas muy agradables que han ido haciendo estas fechas navideñas muy entrañables:

Nos visitaron Jorge y Constanza, dos amigos, dentistas ambos. Él es el más austral, ya que ejerce en Puerto Williams y de allí le conocíamos.

                                          con Jorge y Constanza

La siguiente visita, en este caso emocionante, fue de la familia Canovas. Estamos hablando de la tripulación del SURAZO, uno de los primeros barcos con los que compartimos navegaciones en Brasil, ellos regresando de su vuelta al mundo y nosotros en el principio de la nuestra.

Ya habían estado aquí Sebastian y Alexandra, su novia. Ahora ha sido el resto de la familia.

                                                      los Canovas

Con Luis y Nicolás recordamos las batallitas de nuestra estancia en Santiago de Noronha y Natal. Ha sido como si el tiempo no hubiera pasado. Todos recordábamos con detalle las anécdotas y las vivencias de aquellos días tan estupendos.

Para seguir con las celebraciones, Begoña, como buena valenciana, preparó un arroz, que compartimos con Gustavo en el PRATI

 arrocito valenciano                                                         

Despedimos el año en casa de Gustavo, donde siempre nos hemos sentido tan cómodos, desde nuestros primeros días en Ushuaia, con el cordero patagónico de rigor y tomando uvas pasas en las campanadas que Begoña nos marcaba. Aquí no hay costumbre de poner las campanadas de ningún reloj para hacer el cambio de año. Vimos en la televisión un reloj digital en un ángulo de la pantalla y cuando marcó las 00 horas, dijeron que ya estábamos en el 2015 y nos desearon felicidad. Así que nosotros tuvimos que improvisar.

 la Nochevieja.                                                            

Nuestros amigos argentinos, por aquello de acompañar, se comieron las uvas pasas en un periquete por si es verdad eso de que dan suerte.

A la vez que teníamos visitas y celebraciones, seguimos con el avituallamiento del barco, para este periodo en que no tocaremos ningún núcleo de población por un periodo de dos meses, más o menos.

Las fiestas navideñas han complicado este proceso. Los supermercados, abarrotados todos los días, con filas tremendas en las cajas y algunos productos agotados, nos han mantenido en un tejemaneje de idas y vueltas, hasta conseguir que no quepa nada más en las sentinas y espacios posibles del PRATI.

                  Este es el baño de proa babor, por ejemplo

Es evidente que no lo usamos para lo que está destinado, jua, jua.

Ayer, por la tarde, recibimos otra visita. En pleno zafarrancho de estiba. Gomone, de la Taberna del Puerto, el foro nautico del que tanto hemos hablado, Joaquín en la vida civil, llegó a Ushuaia para enrolarse en un velero y doblar el Cabo de Hornos. Antes de tan apetecida experiencia se pasó por el PRATI, del que se declaró “fósforo” y del que sabía casi todo. Así que fue fácil convencerle para compartir velada, en nuestro Dublín favorito y después en el PRATI. Lástima que las fotos se hicieron con su cámara y que esta misma mañana salió para Puerto Williams, pero ya nos las mandará y formarán parte de nuestra pequeña historia.

Mañana, temprano, iremos a Prefectura para hacer la salida oficial de Argentina. Pensamos tomar un buen desayuno de regreso al barco y después zarpar. Dejamos atrás una etapa de esta vida errante y como siempre nos ocurre, la nostalgia nos afecta. Hemos sido felices aquí, hemos hecho amigos y nunca volveremos a vivir lo mismo. Por la proa, nuevos horizontes nos esperan.

Soltamos amarras de Argentina. Gustavo, quien mejor, fue el encargado de soltar la última amarra del PRATI, esa que queda para siempre en el recuerdo.

Compartimos desayuno y con emoción le dejamos en el pantalán diciendo adiós.

                                          Gustavo

Ushuaia por la popa                                                  

La navegación hasta Puerto Williams fue de lo más plácida, sin apenas viento, sin apenas sol, sin nada de lluvia. Por primera vez Begoña y Carlos contemplaron encantados a los pingüinos nadando por la proa del barco. La toma de contacto con el Beagle siempre resulta especial.

                                        Pingüinos por la proa

Y ahora Chile                                                    

Una petición repetida por parte de Kurucho, el hermano del capitán y ahora también por otros seguidores de la Web, es que adelantemos nuestros planes para saber con anterioridad los pasos que daremos y documentarse sobre los lugares a recorrer. Parece buena idea, pero no muy fácil de cumplir.

                                  PRATI en Micalvi

Estamos en Puerto Williams, de nuevo en el MICALVI, esta vez en tercera fila a partir del Victory, nuestro “amarradero” de la pasada invernada del PRATI.

El MICALVI está full, es temporada alta y los barcos van y vienen a La Antártida, Cabo de Hornos y Ventisqueros. Los franceses, como siempre, se nos comen. Son mayoría allá por donde vayamos.

La lucha por un miligramo de wifi es encarnizada. Lo de mandar fotos, una utopía.

Ayer, mientras nos fajábamos, tablet en mano, coincidimos con una pareja española. De donde sois, que hacéis por aquí, etc. etc. resultó que el chico era de Guadalajara, esa ciudad tan marinera en la que hemos vivido los últimos 30 años y la chica, santanderina ella, formando parte de un equipo franco español va a doblar el Cabo de Hornos sobre una tabla de salvamento, o sea, va tumbada sobre una tabla de 12 pies y rema con los brazos. Son 3 en el equipo y se turnan cada hora y media. Imaginamos que en Internet se hablará de esa expedición que por aquí se mira con escepticismo. Ambos forman parte del equipo alcarreño de salvamento que ha ganado bastantes premios a nivel nacional. Cosas veredes, hermano Sancho……..

El miércoles o jueves, en base a la meteorología, saldremos hacia los canales chilenos con rumbo a Puerto Montt y Valdivia. Tenemos margen hasta finales de marzo, cuando Begoña y Carlos tienen que regresar a España. Es un plazo suficientemente largo para disfrutar del entorno pero sin planes fijos.

Hay que avanzar, siempre de día, lo que ahora no constituye mucho problema por el tamaño de los ídem. Amanece antes de las 4 y hay luz hasta las 11 de la noche. Procuraremos parar cuando el entorno sea tan maravilloso que merezca una segunda miradita y cuando el mal tiempo no aconseje navegar.

El tema climatológico esperamos que resulte mejor que el del año pasado. De hecho la estancia en Ushuaia ya lo ha sido. Hemos tenido muchos días luminosos y con temperaturas estupendas. Dicen que lo que no era normal fue lo del año pasado. A ver si es verdad.

Hemos puesto a funcionar el Pactor 3 que por la zona sur del Atlantico no nos valía para nada y que aquí parece que si. Este equipo sirve para enviar y recibir emails y meteos, a través de la BLU, esa radio estupenda que nos comunica con otros barcos y con las Ruedas de Navegantes. Resulta lento, lo que no es un problema en nuestro caso y su utilización está limitada a 90 minutos semanales, no se pueden enviar imágenes ni archivos adjuntos.

No funcionaba por la zona anterior por falta de estaciones a las que conectarse, en Chile, sin embargo, hay una que funciona muy bien y es conectando con esa estación como se envían y reciben los correos. El sistema se llama Sail Mail y con eso queda clara su función.

Volviendo al principio, en cuanto a los planes, está claro que intentaremos parar en los lugares más atractivos, siguiendo el libro de Mariolina y Giorgio Adrizzi, que por aquí es el manual básico de navegación y que algunos llaman la biblia. Así como hacer caso de los consejos de otros navegantes con mucha experiencia en la zona y con los que en el MICALVI se comparten pyscos y charlas hasta altas horas de la madrugada.

Anoche hubo baile. Resulta que Begoña le da a la salsa cosa fina y triunfó en su primera visita al mítico bar del MICALVI. Había un tipo, con buzo de mecánico, bien adornado con bandas reflectantes, que tenía el baile San Vito. Estaba loco por bailar con Begoña y casi tuvo que esconderse para librarse del acoso. Todo con buen rollito, por supuesto.

Por la mañana, para despejar la resaca, hicieron la excursión al Cerro Bandera.

PRATI desde Cerro Bandera                                     

                                Begoña y Carlos en Cerro Bandera

Esperamos tener tiempo para visitar Chiloé con Begoña y Carlos. Nosotros, si nos gusta tanto como todo el mundo dice, puede que volvamos para una temporada más larga por allí.

Ahora estamos aprovechando los últimos días de contacto con la civilización. Anoche compartimos mesa en la cena con un mejicano, una colombiana y un trinitario afroamericano (un guapo negro de Trinidad y Tobago) que ante la mayoría de habla hispana, estaba pelín desplazado.

En fin, por hoy estuvo bien. Ahora, como retomamos las buenas costumbres, seguiremos en contacto periódicamente.

Que los Reyes sean buenos con vosotros. Por aquí, más allá del fin del mundo, igual ni pasan.

Todo bien a bordo del PRATI. Salimos, según lo previsto, el día de ayer, bien temprano, para hacer el primer fondeo en Caleta Olla.

Posición

Latitud: 54º 56,41 S

Longitud 69º 09,39 W

Noche absolutamente en calma.

En la mañana del día de hoy, otra vez madrugamos y nos ponemos en camino hacia el Seno Pia.

Será Begoña quien cuente sus impresiones de esta zona y las mandaremos, si funciona el sistema, mediante el Sail Mail, desde el siguiente fondeo.

Hoy Begoña narra sus impresiones de estos primeros días de navegación por el Beagle:

Ya estamos navegando por los glaciares del Beagle, anoche llegamos a Caleta Olla acompañados de albatros y delfines blancos y negros.

Esta mañana, continuamos navegando por el brazo noreste del Beagle, es una sucesión de ventisqueros y de glaciares que caen al mar, el que más me impresiona el Italia, aunque luego no paras de ver uno tras otro, así como cascadas gigantes de agua que caen al mar. Hoy en teoría el tiempo es bueno, pero el frio se te mete dentro y no sale, e igual llueve que sale el sol, bueno, mas llueve que otra cosa.

El colofón del día ha sido entrar en el Seno Pía , donde ya tenemos que ir esquivando los bloques de hielo, en un pasillo rodeado de montañas y al fondo el glaciar y donde unos delfines nos acompañan y juegan con nosotros rodeándonos y saltando durante todo el trayecto. Tomamos el brazo oeste del Seno Pía donde fondearemos dos noches porque anuncian mal tiempo  junto al velero Polarwind, conforme entramos cada vez hay más hielo y toca navegar a uno o dos nudos para intentar esquivarlos pero muchas veces es imposible, el ruido que hacen los bloques del hielo al chocar con el casco es impresionante y verlos pasar por la red entre los patines también, cada vez se complica más y de pronto, ¡zas! otro glaciar y nuestro fondeo para esta noche rodeado de bloques de hielo y con una cascada de agua a 20 metros. Esto es ALUCINANTE, INCREÍBLE e IMPRE SIONANTE.

Esta noche ya tenemos hielo para los martinis del asadito que vamos a hacer en la playa.

Nuestra posición es:
Latitud.-  54º 46´370 S
Longitud.- 69º 40´605 W

Posición
Latitud.-  54º 52´96 S
Longitud.- 70º 22´93 W

El viernes, como ya contó Begoña, fondeamos en Seno Pía. En esta ocasión en el brazo Noroeste, fondeadero N.

Es uno de esos lugares destacados en los derroteros. Rodeados de hielos flotantes y con una cascada a 50 m.

Ayer, bajo la lluvia, hicimos un asadito en la playa. Nos reunimos con la tripulación del PolarWind, barco amigo de la vez anterior: 3 alemanes, 2 suizos, 1 chileno y 4 españoles, lo pasamos estupendamente, sin entendernos demasiado, todo hay que decirlo, pero con ese lenguaje internacional de beber, comer y disfrutar de lo que tienes por delante.

Esta mañana, tras recorrer un trecho más del brazo Noroeste para acercarnos al glaciar, nos despedimos del PolarWind y emprendimos la navegación hacia Puerto Montt. A partir de aquí todo será nuevo y más solitario. Los barcos de chárter siempre recorren los Ventisqueros y a partir de ese punto nos encontraremos con pocos barcos.

Disfrutamos del paseo por el Seno Pía, con sus hielos, sus delfines incansables y el paisaje tan espectacular y después arrumbamos hacia nuestro fondeo actual.

Esta es una de las caletas consideradas de 5 estrellas, por su entorno, su seguridad y el detalle exclusivo de que solo cabe un barco. Hoy es el PRATI quien la disfruta.

El recorrido, un día más, con un poco de todo. Rayos despistados de sol, ausencia total de viento, de repente 20-25 kts. y un chubasco de cuidado. Hubo incluso algunos copos de nieve.

Hemos comido casi a las 5 y como es domingo ¡Fiesta! Centolla y jamón ibérico. Después nos hemos dado una ducha y por la noche cenaremos una pata de cordero patagónico, regalo del amigo de nuestro amigo Pedro el Almirante. ¡a tu salud!