TRINIDAD, el regreso………..

Día 23 de noviembre, 20,50 horas embarque en Barajas, T-4, a Heathrow. Largo traslado en autobús, de casi dos horas, a Gatwick, carretera principal cortada por obras. Dormimos en un hotel del aeropuerto y temprano rumbo a Port of Spain, Trinidad. A las 4 de la tarde del día 24, hora local, tomamos tierra en una isla verde y enchumazada de agua. También llovía en ese momento. La temporada de lluvias continua hasta final de año.

Paso de Inmigración y Aduana con cierto susto pues en nuestras maletas llevamos un cargamento de medicamentos para reponer el botiquín y un desfibrilador cardíaco que por su aspecto puede causar sospechas de algo raro. En la otra maleta el consabido spanish embutido,  que por estas longitudes suele estar prohibido. Ningún problema, pasamos como si tal cosa.

Unas horas más tarde, tomó tierra nuestro amigo-tripulante Rafa, que se ha incorporado a nuestro proyecto.

Día 25, paso por Aduana de Chaguaramas para oficializar nuestra vuelta al barco. Con la inquietud natural que supone haber dejado un barco 7 meses solo, entramos en el varadero y efectivamente se confirmaron las noticias que todo el mundo había dado,  de que los barcos se vuelven verdes y así encontramos al PRATI. El encargado del varadero nos dice que antes de subir a bordo, vayamos a la oficina a ver al jefe.

–  «Les tengo que dar una mala noticia, la semana pasada ha entrado gente al barco y se han llevado algunas cosas». Rápidamente cruzamos el «prao enchumazao» y subimos al cata. El desorden es importante. En un rápido vistazo vemos que todo el equipamiento de navegación y esencial del barco está intacto. No hay nada roto, los señores cacos han sido amables y cuidadosos. Como estamos en trámites con la policía y el varadero, no vamos a entrar en detalles de momento.

Estamos bien, limpiando más que nunca y deseando cambiar de isla lo antes posible.

Ecos de sociedad.-
Hemos conocido a Leo, navegante de pro, de origen asturiano, que nos había contactado antes vía email. Está aquí con su hija y un amigo sudafricano, poniendo en orden un cata que acaba de comprar. Se dirigen ahora a Martinica para acabar los equipamientos. Tuvimos una cena tertulia muy amena y a los postres aparecieron Boby y Gonza, navegantes del cono Sur a los que habíamos conocido en Salvador, alegría y cervecillas para seguir charlando.

Hoy, domingo, lo estamos dedicando a descansar. Las lluvias son abundantes y continuas, apenas hemos visto el sol, aunque cuando sale, aprieta y la temperatura es formidable todo el tiempo. Nos estamos aclimatando rápido y esos siete meses pasados de sofá e inactividad, han quedado atrás. Soñamos con volver a navegar y esperamos que en unos diez o quince días podamos hacerlo.

To be continued………
Los Pratis (3)