de la Isla de Adonara a la Isla de Flores

5 de septiembre
Estamos en una bahía llamada Teluk Sagu, en la isla de Adonara, del archipiélago de Flores.
A media mañana, fuimos en el dinghy a conocer el pueblo vecino. Aquí el desembarco es fácil y dejamos el auxiliar con el ancla en tierra. Como la marea está subiendo, pensamos que a la vuelta habrá que meterse en el agua para pillarlo, si nos quedamos a comer aquí. Que es nuestro plan. Unos cuantos barcos de pesca están fondeados en la misma zona.

Inmediatamente, como no, los críos empiezan a venir a saludar. No hablan nada de inglés, solo mister, mister.
Un hombre está cosiendo, con su Singer o similar, de las de pedal, a la puerta de un diminuto comercio. Allí podemos hacer recarga de teléfono, necesitamos hablar con Yakarta para intentar conseguir una bomba de presión de agua dulce que se ha estropeado. Ahora solo funciona una de las dos y tenemos un tanque lleno de agua que no podemos usar. 😡
El pueblo, polvoriento, sucio como es habitual, con pescado puesto a secar al sol que las gallinas picotean tranquilamente. En otra tienda, similar a la primera, compramos caramelos para repartir. Los niños se arremolinan y salen de todas partes, las madres también se acercan a saludar.
En las inmediaciones de la mezquita 🕌 nos invitan a acercarnos a un edificio de aspecto más digno que Carlos piensa que será el bar. 🤣 allí conseguimos enterarnos de que es la casa comunal. Hay una mesa grande, en la que han estado comiendo varias personas, cada una con su vaso de agua, es una comunidad musulmana.
Avanzamos siempre rodeados de niños. Los mayorcitos quieren cambiarme una pulsera de plástico negra por mi reloj. Insisten e insisten, pero no me dejo.
No vemos que se venda ningún alimento fresco. Solo hay 🥥. Sitio para comer, tampoco. Intentamos charlar con todo el que se acerca, pero no hay muchas posibilidades. Aparte de preguntar que de donde somos, poco más resulta comprensible.
Así que nos volvemos, con toda la procesión, hasta el dinghy y de nuevo al PRATI.

Desde el barco, tenemos unas bonitas vistas de cocoteros y montañas. Es la parte más atractiva de la bahía y además hay cerveza fresquita. Así que nos damos un pequeño homenaje antes de comer.

Unos buenos baños por la tarde y las visitas de algún pescador con sus botes de madera, con ellos la conversación es una risa y poco más.
Piet tiene más paciencia que el santo Job e intenta hacerse entender en inglés y a la vez aprender indonesio. Yo Tarzan, tu Jane……

6 de septiembre.
A las cinco de la mañana empieza a verse claridad sobre el mar, amanece muy temprano y nos movemos para cambiar de fondeo y seguir avanzando al W.
Otra navegación a la salud de D. Volvo. El viento se sigue negando. Sacamos el génova para apoyar al motor dos o tres veces, sin mucho éxito. No pasamos de F-2.
Salimos de la Isla de Adonara para arrumbar a la Isla de Flores. Sol 🌞 calor 🥵 y navegación relajada durante 8 horas, para recorrer 42 Nm.

Hemos largado el ancla en una bahía muy profunda, en la que hay que acercarse a la playa para fondear. De 30 metros pasamos a 4, en un momento.
Estamos rodeados de coral y tenemos una playa de arena blanca con árboles de fondo.
El baño ha sido, además de refrescante, un reencuentro con los típicos peces de arrecife. Un poco de ejercicio y a disfrutar de la calma del lugar.

Estamos en Teluk Hading, en la posición:
Latitud.- 08° 13’671 S
Longitud.- 122° 46’039 E

MH