En ruta a los ventisqueros – 26 de marzo 2014

Con la idea de zarpar el miércoles, según las previsiones meteorológicas, el martes amanecemos antes de las 6 viendo que la calefacción ha dejado de funcionar. Esto puede dar al traste con nuestros planes. Es imposible navegar por esta zona sin calefacción.

Toda la mañana estuvieron los mecánicos de a bordo sobre la caldera. Afortunadamente cambiando quemador y auxiliares se resolvió el problema. Nos había ocurrido lo mismo en Puerto Deseado y allí se había cambiado solamente el quemador. Nuevos repuestos nos habían llegado a Puerto Williams y ahora con ellos se ha vuelto a resolver el problema. ¿Por cuánto tiempo? Debe haber alguna causa que desconocemos que provoca estas averías. Con que funcione para estos 15 días nos conformamos. Luego ya se estudiará el problema.

Por la tarde tramitamos en Capitanía la autorización para navegar por la ruta de los ventisqueros. Cervezas en el MICALVI con los colegas de navegación y temprano a la cama. Ya nos hemos situado en una boya para que por la mañana podamos salir sin depender de nadie.

Aún es noche cerrada cuando aparecemos los 4 en el desayunador, son las seis y media. Poco después de las 7, ya con luz, en un día nublado y lluvioso, soltamos la boya y comenzamos nuestra navegación. Salimos de Puerto Williams, doblamos en Punta Gusano y tomamos rumbo W.

Nos siguen en poco rato, seis veleros. Casi todos de gente con la que estamos compartiendo vivencias:

El LOJAN de Daphne y Rainer, pareja de septuagenarios con los que coincidimos doblando Hornos y que ahora parten hacia Puerto Montt. Son gente encantadora y muy animados.

El TANGAROA, con Celine y Pierre, quienes hicieron una recalada en Ushuaia un poco más larga de lo habitual, para que naciera su niña que ahora con casi 4 meses les acompaña. También van a Puerto Montt.

El TARA, con una pareja holandesa, de la que no podemos recordar los nombres aún habíando compartido charlas y vinitos, también en ruta a Puerto Montt.

El PIC’ LA LUNE, de Sonia y Antonio, que van a pasar unos días por los canales antes de viajar a España para escapar del invierno austral.

Los otros dos barcos no son tan cercanos y no sabemos poner ni sus nombres con corrección.

Vienen los seis por nuestra popa y como hoy la visibilidad es muy reducida, cuesta distinguirlos a todos, aunque sabemos que siguen ahí.

Hemos intentado foque más motor, hemos seguido solo a motor, vuelta a sacar el foque y como el viento es flojo y variable no hay manera.

Llueve y llueve mientras avanzamos por el Beagle cuyo paisaje se va transformando, cambia la vegetación, los árboles parecen recortados por un jardinero experto, manteniendo una altura y una disposición homogénea. Abundan las colonias de gaviotas y cormoranes y pasan nadando alrededor del barco grupos de lobos marinos. Algunos más juguetones nos siguen un rato la estela.

A primera hora de la tarde la lluvia se transforma en nieve y así nevando llegamos al fondeadero de Caleta Olla a 58 millas de Williams, lugar muy abrigado de casi todos los vientos donde el fondeo ideal es con el ancla y dos cabos por popa a los árboles que crecen junto a la playa. Primer fondeo del nuevo equipo de tripulantes que se resuelve con rapidez. No hay viento y así todo es fácil.

Posición en Caleta Olla

Latitud.- 54º 56’452 S

Longitud.- 69º 09’412 W

Una hora después empiezan a aparecen los demás. Los chicos ayudan a los del LOJAN que tienen algún problema con su motor y la maniobra se complica un poco. La nieve cae con intensidad. Cuando todos quedan fondeados, la playa está ocupada de lado a lado y los largos de popa se entrecruzan perfectamente sobre los guijarros de la orilla.

Calefacción a tope, cena sustanciosa, un rato de videos y a las diez y media ya estamos escondidos bajos los edredones.

Ha sido una noche plácida, arrullados por la lluvia que según parece nos va a acompañar algún día mas.

Planes a corto plazo: esperar que pase la masa nubosa que se estima dure dos días para navegar en corta travesía, unas 20 millas, hacía el Seno Pía donde aparecen los primeros glaciares.